Atlético volvió a sonreír, pero Pusineri tiene más dudas que certezas para visitar a San Lorenzo

El Decano necesitaba con urgencia levantar la imagen luego de las 5 derrotas consecutivas por el torneo (Gimnasia, Newell’s, River, Vélez y Platense). El partido contra All Boys por Copa Argentina vino como anillo al dedo para esta remontada; ante un rival menor y con (lo que parecía ser) un equipo suplente, Atlético volvió al triunfo en Rafaela.

Para el partido con Instituto, Lucas Pusineri optó por cumplir la frase a rajatabla: “equipo que gana no se toca”. El mismo 11 que le ganó al equipo de Floresta salió al Monumental para jugar contra los cordobeses. Volvió a funcionar, Atlético se quedó con la victoria luego de un partido ajustado y sufrido; pero, victoria al fin.

Ahora la gran pregunta es qué hará Pusineri para el siguiente partido cuando visite a San Lorenzo el sábado a las 15:30 hs. La opción más tentadora quizás sea la de repetir el equipo nuevamente, nadie le podría reprochar nada al técnico Decano. Pero, ¿hicieron los méritos suficientes para mantenerse dentro del 11 inicial? Los (actualmente) suplentes, ¿tienen argumentos para pedir ser titulares? Seguramente estos interrogantes rondan por la cabeza de “Pusi”.

Empezando de atrás para adelante, iniciando justamente en el arquero, Tomás Durso le tocó presenciar los últimos partidos desde el banco de suplentes. El ex arquero de Gimnasia llegó al Decano en enero de 2024 y no está cumpliendo con el mismo rendimiento del año pasado, el cual hizo que Atlético se quede con su pase (había llegado a préstamo) y firme contrato hasta diciembre de 2027. Su reemplazo, Juan González Quiroga, tuvo cierta complicidad en el segundo gol de Alex Luna para Instituto. Primera duda para Pusineri.

En la parte defensiva parece estar todo medianamente resuelto, más por falta de variantes que por buenos rendimientos. Las malas actuaciones de Brandán y De lo Santos, obligaron a Pusineri a quedarse con Martínez y Brizuela respectivamente. Ferrari en principio es de los mejores considerados defensivamente por el técnico, y en el lateral izquierdo no hay otra alternativa más que Orihuela tras la dura lesión de Infante, que lo tendrá fuera de la cancha por al menos 8 meses.

La ausencia del BB Acosta es quizás la decisión más importante que tomó Pusineri desde que volvió a ponerse el traje de técnico en Atlético; el oriundo de la Banda es sin dudas el principal referente del plantel. Kevin López y Adrián Sánchez deberán cumplir buenos partidos y sin errores para que no se precise la experiencia de Acosta. Para los costados de la cancha, el “Chueco” Laméndola, con un par de goles, empieza a pedir pista para volver a ser titular; lo cierto es que cuando tuvo la oportunidad desde el arranque, no cumplió con las expectativas que tenían.

En la delantera hay un nombre que tiene el puesto asegurado dentro de los 11: Mateo Coronel. El ex Argentinos Juniors convirtió en el último partido ante Instituto y es el jugador más desequilibrante del equipo de mitad de cancha para adelante. La duda está en su acompañante; Leandro Díaz llegó como reemplazante de Marcelo Estigarribia y con el peso de ser uno de los jugadores más queridos por el hincha en los últimos años. Debutó con gol ante Sarmiento y volvió a convertir contra Vélez y All Boys, pero su rendimiento más allá de los goles no está siendo lo que se esperaba de él. Lisandro Cabrera hizo su debut de titular por Copa Argentina y cumplió con un gol y promediando un buen partido; contra Instituto no gravitó mucho y perdió más de lo que ganó en las divididas. 

Lo cierto es que ahora Atlético respira más tranquilo luego de los dos triunfos pero no debe confiarse, le saca solamente dos puntos a Vélez por la tabla anual (actualmente en zona de descenso) y ahora se le suma una nueva posibilidad de entrar a la siguiente fase del Apertura: se encuentra a tres puntos de Godoy Cruz, el último clasificado por ahora.